En 2018, Arcor perdió plata por segunda vez en la historia
La compañía alimenticia, fundada en 1951, sólo perdio dinero en 2002 y el año pasado. La industria alimenticia, muy golpeada por la recesión, la devaluación y los tarifazos.
Arcor se sumó a la lista de compañías alimenticias que tuvieron un 2018 para el olvido por la devaluación y la caída del consumo.
Con pérdidas anuales de $1.010 millones, dicha caída fue la segunda vez desde su fundación en 1951 que termina un ejercicio en rojo. El único antecedente se remonta a 2002, en medio de una de las crisis económicas más profundas.
Arcor informó a la Bolsa que el año pasado sus ventas sumaron $85.600 millones y que aún así tuvo que afrontar un resultado negativo de $1.010 millones.
Este escenario es prácticamente calcado en muchas otras alimenticias: recientemente Molinos Río de la Plata y Mastellone Hnos. informaron que durante el año pasado perdieron $1.700 y $1.900 millones, respectivamente.
En el segmento “Golosinas y Chocolates” alcanzó en 2018 ventas a terceros por $17.125,9 millones, mientras que en 2017 habían sido de $17.568,8 millones. “En un año en que el consumo en general se vio afectado por la caída del poder adquisitivo de los consumidores, el Negocio Golosinas mostró una disminución en sus ventas en volumen”, destacó la compañía.
En el rubro “Alimentos”, las ventas sumaron $7.588,3 millones, mientras que en 2017 ascendieron a $8.173 millones. “En un año de caída general de consumo en casi la totalidad de los mercados de alimentos en la Argentina, las ventas del negocio reflejaron una leve caída de los volúmenes totales comercializados; de igual forma se destaca el buen desempeño en el mercado interno que tuvieron las ventas de jugos en polvo, tomates, polentas, conservas de fruta y aceite”, detalló el informe de Arcor.
El negocio “Galletitas” tampoco se salvó de la caída. Las ventas sumaron $16.103,8 millones, en comparación con los $17.275,8 millones de 2017. “El mercado de galletas comenzó el año con un leve repunte, pero a partir del segundo semestre se evidenció una importante caída como consecuencia de la crisis en la Argentina, lo que finalmente ocasionó que el volumen disminuyera contra el año anterior, pero en menor nivel que el mercado. Igual, cabe destacar el crecimiento en los segmentos de mayor valor agregado, como: galletas dulces secas, alfajores y snacks de copetín”.
Las ventas locales a terceros en Packaging tuvieron más facturación pero menos volumen. Fueron de $14.362,4 millones en comparación con los $10.349,3 millones de 2017. “En un año de caída general de la actividad, se produjo una disminución del volumen respecto del año anterior, con comportamientos dispares entre los diferentes sectores en que participamos: flexibles, industrial y el bolsero, esto último influido por la caída de la actividad de construcción”.