Un nuevo acto de represalia a los huelguistas. Empresa realizó siete despidos

Este miércoles se conoció la noticia que la empresa Santa Elena dejaba cesante a operarios que, casualmente, habían estado en la medida de acción directa llevada a cabo por el STIA. Un nuevo acto de desinterés para con los deseadenses por parte de una empresa pesquera.

Foto: Mar&Pesca

Haciendo caso omiso a lo firmado el domingo entre las partes para ponerle fin al conflicto que duró más de un mes en Puerto Deseado, la empresa productora de Kani Kama despidió a siete operarios por no haberse presentado a trabajar y aludiendo que desde el primer momento el paro había sido decretado ilegal por las autoridades del Ministerio de Trabajo de Santa Cruz.

Los telegramas a los trabajadores, con más de 20 años de antigüedad, solo indican “con causa”.

Solución momentánea

Una vez conocida la noticia el Sindicato de Trabajadores de la Industria Alimenticia (STIA)  intervino y luego de arduas negociaciones en la Dirección de Trabajado de Puerto Deseado dictó la conciliación obligatoria y citó a las partes a una audiencia para el martes 28 de julio, además ordeno a la empresa que  los trabajadores sean reincorporados a sus puestos de trabajo mientras el conflicto se resuelva bajo el ente laboral.

Acción repudiable

La decisión llevada a cabo por Santa Elena es un acto de repudio total debido a que existía el compromiso por parte de las empresas a no efectuar despidos, sin mencionar que existe un decreto firmado en el mes de marzo por el presidente Alberto Fernández, que prohíbe acciones de este tipo durante el tiempo de pandemia.

Puerto Deseado salió a repudiar este hecho antidemocrático, que de no haber sido por la rápida intervención de la justicia laboral, hubiese sido un acto más de soberbia y cobardía por parte de una empresa pesquera en la ciudad.