A los 68 años murió el Gato Peters
Este viernes, a los 68 años, falleció el humorista Ricardo Daniel Peters -más conocido como “Gato” Peters- en la ciudad de Pehuajó.
Su partida ocurrió en la antesala de una de sus tantas presentaciones de “AlparGato, humor para los de a pie”, esta vez en la localidad de San Antonio de Areco. Sufrió una descompensación cuando viajaba por la Ruta 5, a la altura de Francisco Madero. Fue llevado al hospital de Pehuajo, dónde falleció a pesar de los esfuerzos médicos.
El “Gato” Peters se encontraba realizando una gira que comenzó este año en la ciudad de Mar del Plata, luego de haberse propuesto llegar a por lo menos 140 pueblos en menos de un año.
Ricardo Daniel Peters
Había nacido el 11 de marzo de 1955 en Carhué, provincia de Buenos Aires y desde muy joven demostró su innato talento para hacer reír a las personas. Comenzó su carrera en los escenarios universitarios de La Plata y a partir de su llegada a la televisión rápidamente se convirtió en un fenómeno nacional en el ámbito del humor. Su estilo único y su carisma conquistaron a audiencias de todas las edades durante más de tres décadas.
A lo largo de su vida, Gato Peters logró un legado impresionante en el mundo del entretenimiento. Sus actuaciones en teatro, festivales y televisión lo consagraron como uno de los comediantes más destacados de su generación. Su humor inteligente, su capacidad para abordar temas cotidianos y su habilidad para conectar con la gente lo convirtieron en un referente del humor bonaerense y nacional.
Peters creó innumerables espectáculos en vivo y 29 discos que se convirtieron en éxitos de taquilla y ventas. Entre sus obras más destacadas se encuentran “MonoloGato”, “Humor a medida”, “Campechano”, “MasterGato” y su último show “Alpargato”, con los que conquistó los teatros de innumerables ciudades y pueblos de Argentina. Su talento innato y su inquebrantable dedicación lo llevaron a recibir numerosos premios y reconocimientos a lo largo de su carrera.
A pesar de su éxito, el Gato siempre fue conocido por su humildad y generosidad. Fue un apasionado defensor de diversas causas benéficas y trabajó incansablemente para hacer del mundo un lugar mejor a través de su humor y su influencia positiva.
Fue un defensor del estilo de vida de nuestros pueblos, rescató del olvido a sus más entrañables personajes a través de sus relatos y anécdotas.
La noticia de su fallecimiento ha conmovido a seguidores, colegas y amigos. Su legado perdurará a través de su extensa obra y el impacto que tuvo en la industria del entretenimiento. Gato Peters será recordado como un artista extraordinario y un ser humano excepcional.