La CGT marchó con reclamos y duros mensajes
Deseado Noticias una vez más presente en las manifestaciones masivas que se dan en pleno centro de la ciudad de Buenos Aires. Esta vez la CGT caminó y lanzó reclamos y mensajes hacia la Casa Rosada. Juan Mateo Aberastain Zubimendi estuvo allí.
Miles de trabajadores y militantes de cientos de gremios que pertenecen a la CGT y de organizaciones sociales marcharon hoy por el centro de la ciudad de Buenos Aires y demostraron ante el gobierno nacional y los sectores más duros que responden a la vicepresidenta Cristina Kirchner su capacidad de movilización. La manifestación se produjo en momentos en que la tensión interna en el oficialismo nacional no cede y persisten los tironeos por el rumbo de la campaña y de la gestión, de cara a las elecciones del próximo 14 de noviembre.
Miles de personas se concentraron en Paseo Colón e Independencia para participar de un acto convocado por la CGT para hacer su propia celebración del Día de la Lealtad Peronista. La manifestación también provocó un caos de tránsito: no fue para menos, ya que en su momento de mayor convocatoria, 100 manzanas estuvieron afectadas por los cortes dispuestos por la Secretaría de Transporte del gobierno porteño.
Entre los datos salientes del acto, además de la presencia de miles y miles de manifestantes, es que a las 13:30 se pudo ver llegar a la esquina de la concentración a los principales referentes del gremialismo, entre ellos Héctor Daer, Antonio Caló, Hugo y Pablo Moyano, Sergio Romero, Carlos Acuña, José Luis Lingeri y Víctor Santa María -entre otros- escoltados por una gran marea verde de afiliados de Camioneros que hicieron una suerte de cordón de seguridad. Se trata de una imagen infrecuente, debido a que continúan las divisiones en el seno del sindicalismo, entre “Gordos”, cristinistas, combativos y el moyanismo.
Bajo el lema “Desarrollo, Producción y Trabajo”, la central obrera realizó la manifestación con la que se expresó a favor de “profundizar el diálogo social insitucionalizado”, en un clima marcado por las elecciones dentro de la confederación de trabajadores y de la otra decisiva elección: la de medio término, después de la derrota demoledora que sufrió en septiembre último en las PASO. A diferencia de otras convocatorias, todos los sectores del sindicalismo confirmaron su presencia. De hecho, uno de los mensajes que se intentó dar es el de unidad del movimiento obrero.
Pero no sólo hubo participación del sindicalismo. También, las organizaciones sociales enroladas en el movimiento identificado como “Los Cayetanos” -que se reconocen bajo el liderazgo espiritual del papa Francisco- tuvieron un lugar destacada en la jornada de movilización en la ciudad de Buenos Aires. Se hicieron presentes la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), de Juan Grabois, el Movimiento Evita de Fernando Navarro y Emilio Pérsico, la Corriente Clasista y Combativa (CCC) del diputado oficialista Juan Carlos Alderete, y la facción de Barrios de Pie que conduce el candidato a diputado nacional y ex funcionario nacional Daniel Menéndez. La gran ausente es la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA), que no fue invitada.
Se esperaba que hubiera algún orador que leyese el documento al pie del monumento “Canto al Trabajo”, de Paseo Colón e Independencia, pero finalmente sólo una locutora reprodujo las palabras, “Es tiempo de justicia social”, aseguró la CGT, que reclama “elaborar en conjunto los consensos que nos permitan poner el empleo productivo en el centro de las políticas públicas para superar la situación que hoy margina a los sectores más desprotegidos, que profundiza las desigualdades sociales y condiciona el crecimiento uniforme y equitativo de nuestro país”.