Intendencia vs Minería en Puerto Deseado, el dilema de mezclar peras con manzanas
Días atrás mediante una carta abierta, el nuevo Intendente de Puerto Deseado se dirigió a la comunidad para manifestar que la empresa Mina Cerro Moro, Estelar Resources, propiedad de Pan American Silver, señalando entre otras cosas que “exceden la cuestión contable y comprenden la buena ética empresarial y son los que ponen en riesgo la mutua cordialidad y en consecuencia, la licencia social que les permite operar en la zona” sin mencionar claro está que, según pudo indagar este portal, nunca se acercó a la empresa o sus representantes en búsqueda de diálogo y consenso.
Resulta extraño que el joven funcionario, aun habiéndose desempeñado previamente en la función pública de Puerto Deseado como concejal o habiendo sido hasta hace poco integrante de la cámara de proveedores mineros de Santa Cruz (Capromisa) desconozca que Cerro Moro, aun sin estar en producción, desde los inicios de su etapa de exploración, ha dado sobradas muestras de compromiso y responsabilidad social con la comunidad. La construcción de edificios tales como el Centro de Día o la Sede Universitaria; la promoción de instituciones y asociaciones locales mediante diversas ediciones del seminario de alianzas; acciones y actividades para mejorar la provisión de agua para la localidad; la entrega de vehículos para apoyar a varias instituciones entre ellas el municipio, bomberos, servicios públicos y el hospital o la entrega de elementos varios destinados al cuidado y la promoción de la salud para ese nosocomio como un artroscopio, un ecógrafo, entre otros importantes insumos médicos.
Ha sido de público conocimiento que en épocas muy complejas como la terrible crisis sanitaria ocurrida en el 2020, la empresa comprometió una millonaria suma económica en recursos para acompañar al alicaído sistema sanitario local y provincial. Lo propio hizo también, aun con un “balance negativo” como mencionara el intendente Martinez en su carta, entregando otra millonaria cifra para la construcción de la moderna planta de GIRSU que actualmente funciona en la localidad. Algo similar ocurrió no hace mucho mediante el apoyo y acompañamiento al Hospital local para que hoy la Sala de Hemodiálisis en ese nosocomio sea una realidad que mejoró la vida de muchas familias deseadenses.
Basta con recorrer algunos portales informativos o algunas de las publicaciones que la empresa realiza en sus redes sociales para tomar real dimensión del importante cambio de paradigma de relacionamiento comunitario, mediante el cual la empresa se vinculó, durante los últimos años, con más de un centenar de instituciones, asociaciones civiles, clubes deportivos y agrupaciones locales a los cuales acompañó y acompaña en la actualidad para el avance y desarrollo de sus acciones o actividades.
Sin embargo ninguna de estas cuestiones parece haber sido considerada por Martinez, como si se tratara de una persona que no ha vivido en su localidad. Quien, de una manera despojada y sin reparos, anunció hoy entre sus 9 medidas para combatir el déficit millonario con habría recibido el municipio, una de ellas dedicada únicamente a la revisión de la licencia social minera, como si la responsabilidad y el éxito de su gestión debiera depositarse únicamente sobre los hombros de una empresa que según lo que venimos observando, debería a ojos del intendente, suplir las responsabilidades del estado.
Quienes conocen a Martínez, argumentan que tiene una muy buena relación con el Intendente de Puerto San Julián y que lo que pretendería es replicar la realidad de esa localidad en Puerto Deseado, algo que no sería necesariamente algo malo. Es muy común escuchar en Puerto Deseado, “que bien está San Julian”, “Deseado debería y podría estar así”, Etc. y lo cierto es que Puerto San Julián está muy bonito, limpio y ordenado y en esa realidad mucho tiene que ver el acompañamiento de Cerro Vanguardia, hasta ahí nada que discutir ni observar.
Lo que esta editorial pretende es aclarar algunas cuestiones que quizá, no habrían sido tenidas en cuenta por el joven mandatario municipal de Puerto Deseado. Primeramente para trazar una analogía o comparar algo, y en tal caso obtener un dato o resultado útil, las cuestiones que se comparan deben tener características similares.
Para una mejor comprensión de lo que se pretende expresar van algunos datos técnicos informados por el INDEC:
Población de Puerto San Julián: 12.911
Población de Puerto Deseado: 29.463
Así, a simple vista se puede deducir que una localidad como Puerto San Julián, que se acuerdo a los datos obtenidos durante el último censo nacional, no llega siquiera al 50 % de los habitantes que actualmente alberga Puerto Deseado. Claramente la realidad de una y otra localidad es diferente, al igual que sus necesidades, problemáticas y desafíos.
Por otro lado hay que considerar cuestiones técnicas al respecto porque, insistimos una vez más, no se puede comparar peras con manzanas. Se comparten a continuación algunos datos de interés, informados por el Ministerio de Economía de la Nación, a través de su Secretaría de Minería.Años de explotación efectiva Mina Cerro Vanguardia: 35
Años de explotación efectiva Mina Cerro Moro: 5
Volumen de Producción de Mina Cerro Vanguardia:156756 oz
Volumen de Producción de Mina Cerro Moro: 79.988 oz
Pretender que Puerto Deseado, una localidad que históricamente basó su economía en la ganadería y posteriormente en la pesca, “se salve” y valga lo vulgar del término, sustentándose en los aportes que pueda proporcionar una empresa minera, joven en términos de extracción efectiva y pequeña, en términos de volúmenes de producción, es de mínima preocupante, porque eso denota no sólo irresponsabilidad de cara a un proyecto de gestión para los próximos 4 años, sino que además, y esto es lo grave, implica un alto grado de desconocimiento.
La carta abierta del Intendente, aparte de carecer de un análisis técnico profundo, parece ser tendenciosa y extorsiva al no incluir a otras empresas del sector económico productivo de Puerto Deseado en su argumentación. En momentos como estos, es crucial fomentar el diálogo y la construcción de consensos en lugar de adoptar posturas confrontativas.
Es crucial reconocer que, frente a las adversidades, la preeminencia del respeto mutuo y la colaboración se erigen como fundamentales. Atentas a este tipo de accionar, donde el sector político reacciona del modo descripto, las empresas mineras sostienen firmemente la convicción de que el trabajo mancomunado no solo es el camino para superar la presente coyuntura, sino también para afrontar cualquier crisis futura. En este sentido, abogan por la necesidad imperiosa de promover un ambiente propicio para el diálogo constructivo, la empatía y la búsqueda conjunta de soluciones que beneficien a toda la comunidad.
La comunidad de Puerto Deseado merece un debate informado y respetuoso, donde se considere el bienestar colectivo y se evite la polarización. La realidad de Puerto Deseado es única y compleja, y abordarla requiere un enfoque equilibrado y racional.
Fuente: Extremo Minero