“Mi hermano se mató porque sabía que lo iban a soltar y que iba a hacer más daño”
Rosalía, hermana de Omar Alvarado, habló y contó que su hermano sufría mucho por su esquizofrenia. Además, dijo que ya había intentado suicidarse en repetidas ocasiones y que los medicamentos “no le hacían efecto”. No quiere revelar dónde lo enterraron por miedo a “que hagan daños”.
Rosalía Alvarado (39) es una de las seis hermanas de Omar, uno de los dos imputados por cometer el atroz crimen de Puerto Deseado. El sábado pasado fue su cumpleaños, “el cumple más triste” para ella, y al día siguiente tuvo que viajar a Caleta Olivia para reconocer el cuerpo de su hermano y sepultarlo. No quiere que se sepa dónde quedó enterrado “para que no hagan nada”.
La mujer contó que pudieron realizar una despedida corta y con pocos familiares presentes, en la cual estuvieron ella, su marido, su hijo, su madre y la ex mujer de Alvarado. “Salió de la morgue en cajón cerrado y derecho al cementerio”, agregó.
Muchas personas mostraron alegría por el suicidio de su hermano, pero Rosalía dice que no tiene bronca ni nada, pero recuerda que cuando estaba en Caleta una persona se acercó a ella y le dijo: “Vi muchas cosas feas que puso la gente, no sabía que en la tierra hay tantos santos”, esto le quedó en la mente, dijo la mujer.
“Sólo me queda decirle a esa gente que espero jamás les pase nada malo, porque la vida da muchas vueltas y todo lo que sale de nuestras bocas recae en nosotros –expresó Rosalía en relación a la parte de la comunidad que celebró la muerte de su hermano– yo no odio ni le digo nada a la gente, a mí me crió mi abuela y su educación fue la mejor que recibí”.
En tanto, dijo que en la ciudad portuaria no recibió malos comentarios por el fallecimiento de Omar: “Mucha gente me conoce, me ayudan porque saben mi dolor y todo lo que mi hermano sufrió esa enfermedad”.
Omar padecía de esquizofrenia, condición que se le manifestó cuando tenía tan solo 8 años de edad. Pasó varios años siendo tratado y estaba medicado, pero según lo que cuenta Rosalía “los medicamentos que tomaba ya no le hacían efecto”.
“Ya había intentado suicidarse en el pasado, muchísimas veces, ya no podía controlar su mente, no aguantaba esa enfermedad de mierda –contó la mujer y añadió– él era mi mejor hermano y compañero de la vida, yo siempre dije, si tenía un pedazo de pan y alguien le pedía era de dar todo de él”.
Los hermanos eran muy unidos y Rosalía padecía el mismo dolor cuando Omar tenía malos momentos: “Él me decía mamá y llorábamos juntos cuando no podía controlar la enfermedad, la esquizofrenia es lo peor, nadie la elige… a mi hijo se le declaró a los 14 años y me quería morir por lo que se me venía”.
Por último, la mujer mencionó: “Pienso que él se suicidó porque sabía que lo iban a soltar por la enfermedad y que iba a hacer más daño… y él no quiso eso, porque si lo medicaron en la cárcel y entró en razón no habrá soportado lo que hizo”.
Lo único que pide la mujer es que se difunda más sobre la enfermedad, “Le puede pasar a cualquiera y es muy difícil. Tiene distintos grados y no todo se puede controlar. No hay que tener vergüenza o esconder la enfermedad, se tiene que averiguar y tomar conciencia, hay gente que empieza con los síntomas y no se da cuenta”.
Omar Alvarado, de 33 años, se quitó la vida el viernes pasado en su celda de la División Comisaría Cuarta, donde permanecía alojado desde su traslado de Puerto Deseado, el 23 de febrero. Fuentes policiales creen que el suicidio se produjo a las 20 horas, ya que minutos después encontraron su cuerpo durante una requisa. Se había ahorcado con su buzo.
Fuente: La Opinión Austral